A continuación les dejo con el texto que Lucre lleyó en esa noche de Jueves y que tanto nos conmovió.
EL INTRINCADO ARTE DE ESCRIBIR DICCIONARIOS
Desde siempre me pregunté cómo sería hacer un diccionario. No es una actividad que a mí, particularmente, me habría gustado, pues me ha parecido bastante menos apasionante que inventarse mundos o personajes, o que acomodar palabras en la ambiciosa búsqueda de eso que llamamos poesía. Sin embargo, al ir (h)ojeando el nuevo libro de Oswaldo Encalada Vásquez, Diccionario de la Vista Gorda, estas impresiones pueden variar un tanto.
En primer lugar, es necesario anotar que este trabajo de hacer un diccionario humorístico no es del todo original, aunque en nuestro medio no haya sido frecuente. Oswaldo Encalada sigue las huellas de personas tan ilustres como Ramón Gómez de la Serna, quien creó definiciones graciosas, creativas y mordaces en sus famosas Greguerías. Otro de los precursores de Oswaldo en esta tarea es Ambrose Bierce, quien en su Diccionario del Diablo también hace un afortunado ensayo de emparentar las palabras con el humor, casi siempre negro. Oswaldo Encalada se apoya en estos dos grandes escritores, y en otros, para sostener algunas de las definiciones que ensaya en su nuevo libro.
En nuestro medio, un diccionario de estas características es, sin embargo, una producción original que habla, entre otras cosas, del deseo de su autor, conocido narrador cuencano nacido en 1955, de experimentar y probar nuevos caminos dentro del campo de la creación literaria. No sería este el primer trabajo de este tipo de Oswaldo Encalada Vásquez, pues tiene en su haber otros libros similares.
Alguna vez oí a Ramiro Diez, conductor del programa Concierto Sentido, decir que leer el diccionario es una de las más apasionantes actividades que un buen lector puede realizar. Aquella vez su apreciación me pareció bastante exagerada, pues para mí un diccionario, sobre todo si es un diccionario en serio, es un tipo de libro más bien instrumental, nunca se me habría ocurrido ensayar su lectura para animar una tarde de aburrimiento. Sin embargo, el Diccionario de la Vista Gorda de Oswaldo Encalada, así como el Diccionario del Diablo, de Bierce, pueden fácilmente hacer que una cambie de idea.
Las definiciones de Oswaldo Encalada pueden acercarse a veces al un humor ligado a contenidos “no radiales”, como en el caso de
GENEALOGÍA: Algunos árboles genealógicos dan ramas; y otros, rameras.
Otros hacen reflexiones que lindan (o colindan) casi con lo filosófico:
MATARIFE: Hay el caso de quien puede matar y tener fe. Es el caso del matarife.
El humor sencillo de todos los días, nacido de un ingenio lógico y lingüístico, acompaña otra de las definiciones:
MATASIETE: Un matasiete es más valiente que un mataseis.
Y también hay definiciones que se acercan bastante a un chiste de tono más bien ingenuo:
MASTODONTE: ¿Cuál es el animal que siempre es más? –El mastodonte.
El Diccionario de la Vista Gorda de Oswaldo Encalada Vásquez nos conduce así por un mundo en donde las palabras dejan de ser los tradicionales conceptos, los hermosos recursos poéticos, los vehículos de la fantasía y se vuelven, a más de todas estas cosas, pequeñas cajitas chinas o matrioshkas rusas que al abrirse permiten ver el complejo mundo de las posibilidades significativas y emocionales, en donde la poesía y el humor acortan distancias y hablan del infinito potencial creador del ser humano, en este caso, del infinito potencial creador de Oswaldo Encalada Vásquez.
1 comentario:
querido xavier:
creo que hace falta un sitio de red mucho más grande y completo que un blog para tus entrevistas, o, lo que sería parecido, adecuar tu blog de tal manera que tenga un formato más amplio, pues las entrevistas son documentos importantes que, en blogs, muchas veces pasan desapercibidas. piénsalo, podría ser el inicio de un proyecto más ambicioso e incluyente. abrazos, f. iturburu
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